Alfonso Fiorentino realizó el segundo monumento en Gral. Rodriguez sobre la guerra de Malvinas, en el año 1982.
Vecino Italiano que amaba este país, como tantos inmigrantes que lo poblaron hace muchos años e hicieron sus vidas aquí.
Hablamos con su hijo Francisco Fiorentino y esto nos contó:
"Si bien nació en Italia en 1919, su sentido de pertenencia hacia la Argentina fue muy grande, era muy nacionalista. De hecho representó a este país en las Olimpiadas del 48', en levantamiento de pesas.
Él llegó a los cinco años, hizo toda su vida acá y en el '64 se vino a vivir a Gral. Rodriguez.
Siempre tuvo antipatía con la política de los ingleses y de los norteamericanos. Cuando termina la guerra, él hace esa escultura en representación de lo que fue la Guerra de Malvinas:
El Inglés tiene una espada y un trabuco, el gaucho argentino en una mano un poncho y en la otra un rebenque, haciendo ver la inferioridad de condiciones. Así y todo, un norteamericano con un puñal se lo va a clavar por la espalda.
El inglés se encuentra hincado, dando a entender que el argentino le podría haber ganado.
Él las hace de a poco, yo no le ayudé en nada. En se momento mi papá sólo vendía Sanitario y electricidad, no tenía aún el corralón.
Recuerdo que hizo el esqueleto, luego les puso material desplegable y con material las fue llenando.
Las estatuas eran blancas y les había hecho pintar en el pecho las banderas.
Las hizo acá en el patio, yo le traje la tierra para la montaña con un camión y le ayudamos a subirlas cuando hizo las bases.
Después de que él fallece, en el año 2005, se cierra el corralón. Luego ese lugar es alquilado por Alanis, en el 2006, y las estatuas quedaron abandonadas. Se han caído, el sombrero está ahí todavía. Tendríamos que habernos ocupado más de ellas. La idea mía siempre fue traerlas para este lado, hacerles un lugar nuevo pero al nivel del piso. Hablé con mi hermano y vamos a restaurarlas".
Ubicación: esquina Av. Eva Perón y R. Rendon |
Este monumento es muy importante para la historia de Gral. Rodriguez y contiene varios mensajes: un inmigrante italiano y su amor a Argentina, como tantos inmigrantes, el dolor de haber perdido una guerra ante una potencia tan grande, que se vio débil ante un argentino que le hizo frente con honor y coraje, el apoyo y traición de un país americano por intereses políticos, la altura del monumento, ubicado en una montaña de tierra para que sea visto desde lejos y para poner en lo más alto al soldado que defendió su soberanía con valor y decisión.
Por todo esto consideramos que ese homenaje a Malvinas debe formar parte del Patrimonio de Gral. Rodriguez. Palabras dichas a su hijo durante la entrevista, obteniendo el consentimiento para hacer esto público y que llegue a oídos de las autoridades correspondientes.
Alfonso Fliorentino, su amor y homenaje sigue vivo... porque hay personas que se están movilizando para que su mensaje perdure en el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario